Nota de presentación II

Bien, en realidad nunca se me pasó por la cabeza escribir un blog; en realidad, nunca he tenido la costumbre de escribir diarios ni nada parecido. Pero el caso es que, este mes de agosto, me ha tocado en suerte hacer una sustitución en el servicio médico de una empresa y, claro, aquí no hay ni dios... con lo cual el grado de aburrimiento es sumo, así que, rellenando horas muertas navegando sin rumbo por Internet, recordé a mi amiga Laura, en una noche de cervezas y despedida, preguntándome por qué no me hacía un blog, como tiene ella. Y yo dije: "¿y qué voy a contar yo en un blog?". Laura se encogió de hombros y seguimos con nuestras cervezas.
Unas tres o cuatro semanas después, en una de esas horas aburridas, lo he recordado y me he dicho "voy a hacerme un blog". Y aquí está. No tengo ni idea de lo que voy a poner aquí (tonterías con mucha probabilidad, quedáis avisad@s [ver Nota de Presentación I]), pero qué importa...
Este blog queda inagurado y dedicado a Laura, precursora de este blog sin saberlo y que se ha pirado a Finlandia (la tía) y ha dejado una panda de antropólogas desconcertadas de la vida en Madrid.
¡Ea, nos vemos en la blogosfera!